jueves, 28 de febrero de 2013

Vañek, condenado por el plan sistemático de robo de bebés: "No sabía que había detenidos en la ESMA"


En el último día de audiencias indagatorias de los imputados, se presentaron cinco acusados, cuyos abogados solicitaron que sean apartados del juicio por motivos de salud, aunque los peritajes los habilitaron a ser juzgados.


(Fuente: www.espaciomemoria.ar)

Los abogados de Julio Torti y Carlos Generoso solicitaron que sus defendidos no declaren por motivos de salud, pero los jueces reiteraron su decisión de citarlos hasta que haya algún informe médico que lo impide. Asimismo, el Tribunal resolvió que declaren en la sala contigua a la del debate, garantizando la atención médica que pudiera ser necesaria. 
Vañek: "No sabía que había detenidos en la ESMA"
El ex Comandante de Operaciones, Vicealmirante retirado de la Armada Antonio Vañek se negó a declarar hoy, pero se incorporaron por lectura sus declaraciones anteriores en la etapa de instrucción de la causa. Está imputado por los casos de más de 160 víctimas. 
"No sabía que hubo detenidos en la ESMA: me acabo de enterar acá", declaró Vañek en 1998 ante el juez Adolfo Bagnasco. También dijo que "no tuvo conocimiento de que hubiera mujeres embarazadas o que hubieran nacido niños en algún lugar militar de la Armada" y que tampoco supo de un "plan que indique qué hacer con menores nacidos o parturientas". 
Sin embargo, el imputado ya tiene una condena a 40 años de prisión por delitos de lesa humanidad, dictada por el Tribunal Oral y Federal Nº 6 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, integrado por los jueces Domingo Altieri, María del Carmen Roqueta y Julio Panelo. En el fallo, que aún no está firme, fue condenado por su participación en el plan sistemático de robo de bebés, hijos de desaparecidos. 
También en 1998 dijo que "la directiva emanada del Comandante en Jefe de la Armada, el almirante Massera (...) tenía como objetivo impedir el accionar de la guerrilla y la protección de las unidades navales. Las Fuerzas de tareas tenían un plan relacionado con los servicios de inteligencia que poseían información de personas sospechosas. Las detenían, les tomaban declaración y dentro de las 48 horas las ponían a disposición del juez o de la Policía".
Habló sobre los menores que estaban en los lugares en los que se hacían operativos y dijo que "cuando encontraban niños al secuestrar a mayores, se los dejaba con los parientes y esto es cosa de sentido común. En la Armada se enseña sólo a hundir buques y a salvar a los sobrevivientes", concluyó. Tras esas declaraciones, Vañek fue detenido. 
Generoso: una caída como huída
Carlos Generoso no pudo declarar hoy porque se cayó y tuvo que ser asistido por un médico. El imputado fue apartado del juicio anterior por la ESMA, pero los exámenes médicos lo habilitaron a ser juzgado en este nuevo proceso. Está imputado por los casos de más de 230 víctimas. 
Fue conocido bajo los alias de "Fragote", "Agustín" y "Garrido". Integró el Grupo de Tareas 3.3.2 como suboficial del Servicio Penitenciario Federal. 
Morris Girling: "Pensé que venía a contemplar esta reunión (el juicio)"
El imputado, Contraalmirante retirado de la Armada, sostuvo que pensó que "venía acá a contemplar esta reunión, para mí es todo inesperado".
Su declaración fue suspendida porque el imputado dijo no recordar datos personales y no estar en condiciones de hablar.
Eduardo Morris Girling está imputado por los casos de más 40 víctimas. 
Fraguio: "No tengo nada para declarar"
Fueron las únicas palabras del Contraalmirante retirado de la Armada Carlos Jaime Fraguio, quien se negó a declarar. Está imputado por los casos de más de 100 víctimas. 
La audiencia pasó a un cuarto intermedio, tras el cual continuará el debate con la declaración del imputado Torti. 

lunes, 25 de febrero de 2013

Megacausa ESMA: Declaran imputados por los casos de robo de bebés


Los tres acusados que están citados a prestar declaración indagatoria este lunes 25 de febrero están imputados, entre otros, por los casos de bebés nacidos en cautiverio en la ESMA y niños secuestrados junto a sus padres y madres. 

(Fuente: www.espaciomemoria.ar)

Con el juicio que culminó el 5 de julio del 2012, la justicia comprobó que existió una práctica sistemática de robo de niños durante el terrorismo de Estado. Algunos de los responsables fueron juzgados, entre ellos, apropiadores directos de esos bebés nacidos en cautiverio. En el juicio actual por los crímenes cometidos en la ESMA son juzgados imputados considerados coautores del delito de sustracción, retención y ocultación de menores de 10 años de edad, hijos de detenidos-desaparecidos.
Los imputados citados
Pablo Eduardo García Velasco, Capitán de Corbeta retirado de la Armada. Integró el sector de “Operaciones” del Grupo de Tareas 3.3.2 de la ESMA. Es el segundo juicio que afronta por delitos de lesa humanidad cometidos en la ESMA. En el anterior fue absuelto por el Tribunal Oral y Federal Nº 5 (el fallo aún no está firme).
Durante la última dictadura cívico-militar era conocido bajo los alias de “Dante” y “Sierra”. Está imputado por los casos de más de 700 víctimas, acusado como coautor de privación ilegítima de la libertad, imposición de tormentos, homicidio, y sustracción, retención y ocultación de menores de 10 años de edad, delitos agravados por su condición de funcionario público.  Por este último crimen, tiene imputados los casos de 19 hijos de desaparecidos nacidos en cautiverio, y 12 niños secuestrados junto a sus padres: Federico Emilio Francisco Mera, la hija del matrimonio Poblete-Moyano, el hijo del matrimonio Castro-Rubel, hijo de Iris Nélida García, Victoria Donda Pérez, Emiliano Lautaro Hueravilo Alonso, Javier Gonzalo Penino Viñas, Ezequiel Rochistein Tauro, Evelyn Bauer Pegoraro, Alejandro Sandoval Fontana, Laura Reinhold Siver, Federico Pereyra Cagnola, María Isabel Prigione Greco, Juan Cabandié Alfonsín, Sebastián Rosenfeld Marcuzzo, Rodolfo Pérez Rojo Roisinblit, Mariela Rojkin, Juan Manuel Jáuregui Salguero y Vera Lennie Labayrú, quienes nacieron en la ESMA; y Julieta Duantman (4 años de edad, secuestrada junto a su madre), Sebastián Carlos Koncurat (3 años de edad, secuestrado por el GT 3.3.2 y abandonado en un instituto de menores), Nicolás Marcos Koncurat (2 años de edad, secuestrado y abandonado con Sebastián), González Langarica (dos niñas de 2 y 5 años de edad, secuestradas en la ESMA, luego liberadas), Emiliano Miguel Gasparini (1 año y 8 meses de edad, secuestrado junto a su hermano y abandonado por el GT 3.3.2 en Casa Cuna), Arturo Benigno Gasparini (5 meses de edad, secuestrado junto a Emiliano), Marianela Galli (1 año y medio de edad, secuestrado junto a sus padres y abuelas por el GT 3.3.2 y llevada a la ESMA, luego liberada), Rodolfo Lordkipanidse (20 días de edad, secuestrado junto a su madre en la ESMA, luego fue liberado), Eva Marín (secuestrada en la ESMA junto a su padre, luego liberada), María Laura Milesi Pisarello (4 meses de edad, secuestrada en Uruguay y llevada a la ESMA, luego fue liberada) y Lucía Coronel (secuestrada en la ESMA junta a su madre, luego liberada). 
Raúl Enrique Scheller, Oficial retirado de la Armada. Durante la última dictadura cívico-militar era conocido bajo los alias de “Pingüino”, “Schelling”, “Mariano” y “Miranda”. Integró el sector “Inteligencia” del Grupo de Tareas 3.3.2 de la ESMA. Es el segundo juicio que afronta por delitos de lesa humanidad cometidos en la ESMA. En el primero fue condenado a la pena de prisión perpetua, el 26 de octubre del 2011, por el Tribunal Oral y Federal Nº 5, integrado por los jueces Daniel Obligado, Ricardo Farías y Germán Castelli (el fallo aún no está firme).
Está imputado por los casos de más de 150 víctimas, acusado como coautor de privación ilegítima de la libertad, imposición de tormentos, homicidio, y sustracción, retención y ocultación de menores de 10 años de edad, delitos agravados por su condición de funcionario público. Por este último crimen, tiene imputados los casos de 12 hijos de desaparecidos nacidos en cautiverio: Federico Pereyra Cagnola, Victoria Donda Pérez, Emiliano Lautaro Hueravilo Alonso, Javier Gonzalo Penino Viñas, Ezequiel Rochistein Tauro, Evelyn Bauer Pegoraro, Laura Reinhold Siver, María Isabel Prigione Greco, Juan Cabandié Alfonsín, Sebastián Rosenfeld Marcuzzo, la hija del matrimonio Poblete-Moyano y el hijo del matrimonio Castro-Rubel.
Ya fue citado con anterioridad en el juicio. En esa oportunidad, el imputado solicitó incorporar un video a la causa, motivo por el cual los jueces postergaron su citación hasta mañana.
Pedro Antonio Santamaría, Vicealmirante retirado de la Armada. Es el primer juicio que afronta por delitos de lesa humanidad. Entre las imputaciones en su contra, por más de 300 víctimas, están los casos de 15 niños.  
Santamaría está acusado como coautor de privación ilegítima de la libertad, imposición de tormentos, homicidio, y sustracción, retención y ocultación de menores de 10 años de edad, delitos agravados por su condición de funcionario público. Entre los casos por los niños, tiene como víctimas a dos menores secuestrados junto a sus padres: Emiliano Miguel Gasparini (1 año y 8 meses de edad, secuestrado junto a su hermano y abandonado por el GT 3.3.2 en Casa Cuna) y Arturo Benigno Gasparini (5 meses de edad, secuestrado junto a Emiliano); a dos niños nacidos en la ESMA y aún desaparecidos: el hijo del matrimonio Castro-Rubel y la hija del matrimonio Poblete-Moyano; y a 11 bebés nacidos en la ESMA, quienes recuperaron su identidad: Federico Emilio Francisco Mera, Victoria Donda Pérez, Emiliano Lautaro Hueravilo Alonso, Javier Gonzalo Penino Viñas, Ezequiel Rochistein Tauro, Evelyn Bauer Pegoraro, Laura Reinhold Siver, Federico Pereyra Cagnola, María Isabel Prigione Greco, Juan Cabandié Alfonsín y Sebastián Rosenfeld Marcuzzo.
Cobertura especial
El Espacio Memoria y Derechos Humanos (ex ESMA) y la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación realizan una cobertura especial sobre la megacausa, que puede seguirse en www.espaciomemoria.ar
Para participar en las audiencias
Por disposición del Tribunal, integrado por los jueces Daniel Obligado, Adriana Palliotti y Leopoldo Bruglia, pueden presenciar el juicio oral y público los mayores de 18 años de edad que se acrediten con DNI, cédula o pasaporte en los Tribunales de Retiro, en Av. Comodoro Py 2002, en la sala Auditorium. Las audiencias se realizan los lunes, miércoles y jueves desde las 10 horas. 

Rolón habló de la película "Infancia clandestina"


En su declaración indagatoria, el imputado Juan Carlos Rolón hizo referencia a la obra de Benjamín Ávila, hijo de desaparecidos. Intentó instalar la Teoría de  los Dos Demonios, al sostener que no hubo terrorismo de Estado, sino una guerra. 

(Fuente: www.espaciomemoria.ar)
"No pretendo entrar en la historia grande"
Juan Carlos Rolón está acusado por los casos de más de 300 víctimas de la ESMA. Está imputado por el delito de homicidio agravado en perjuicio de varias víctimas, entre ellas la militante de la organización Montoneros Norma Arrostito.
En la ESMA usaba los apodos de "Juan" y "Niño", según relataron los sobrevivientes de aquel centro clandestino de detención, tortura y exterminio. 
"Como muestra la película nominada al Oscar ´Infancia clandestina´, ha sido una guerra interna", dijo Rolón en referencia la obra de Benjamín Ávila, hijo de desaparecidos. 
De este modo, intentó basar su declaración en la Teoría de los Dos Demonios para justificar el accionar de las Fuerzas Armadas en la comisión de delitos de lesa humanidad. 
"Nunca vi un bebé o niño en la ESMA"
Rolón ratificó sus declaraciones indagatorias previas, hechas en la etapa de instrucción de la causa, a cargo del juez Sergio Torres.
Sobre el plan sistemático de robo de bebés, hijos de desaparecidos, sostuvo que no vio niños en la ESMA, a pesar de que el plan ya fue comprobado por la justicia, en un fallo del Tribunal Oral y Federal Nº 6, dictado el 5 de julio del 2012.
Delincuente u oficial de la Armada
El imputado planteó que tiene dos opciones ante el segundo juicio que afronta por delitos de lesa humanidad: "o me defiendo como un delincuente o me defiendo como un oficial de la Armada. Obviamente, me voy a defender como un oficial de la Armada".
Al igual que otros acusados, Rolón niega que ya no es parte de las Fuerzas y que hoy está en el banquillo por una megacausa que investiga violaciones sistemáticas a los derechos humanos, cometidas por el terrorismo de Estado que tomó el poder en la última dictadura cívico-militar. 
"Venganza"
"Estamos en un juicio político de venganza y revancha, a través del Poder Judicial", dijo Rolón en referencia al debate oral y público a cargo del Tribunal Oral y Federal Nº 5, en el que se investigan los casos de 789 víctimas y se esperan las declaraciones de más de 800 testigos. El imputado agregó: "estos juicios son la continuación de la guerra, pero por otros medios". 
En línea con otros acusados, sostuvo que los jueces del Tribunal no son los naturales, porque "no se puede juzga una guerra con el Código Penal". 
La declaración indagatoria es parte de la legítima defensa de los imputados. En ese marco, Rolón dijo que "tengo muchos amigos en la justicia federal", por si fuera necesario conocer el mensaje. 
"Responsabilidad operativa"
Juan Carlos Rolón fue parte del sector "Inteligencia" del Grupo de Tareas 3.3.2 de la ESMA. En su declaración de hoy dijo que "asumo mi responsabilidad operativa en los secuestros de Martín Grass y Juan Gasparini", pero rechazó las acusaciones en su contra sobre el secuestro de Dagmar Hagelin. 
"Clemencia"
En sus palabras finales, Rolón dijo que "yo tuve clemencia, acá quedó demostrado por los testigos del anterior juicio. Si he tenido alguna responsabilidad, la he saldado al estar 11 años preso. Solicito continuar el juicio en libertad". 
Arrú y los vuelos de la muerte
El segundo imputado que declaró hoy fue Mario Daniel Arrú, acusado en la causa que investiga los vuelos de la muerte. Está imputado por los casos de 50 víctimas. Arrú negó las acusaciones en su contra y ratificó sus declaraciones anteriores, las que fueron leídas en la audiencia.
"Los vuelos nocturnos eran de instrucción"
Así fundamentó su inocencia con respecto a los vuelos de la muerte. En particular, Arrú está imputado por el vuelo del 14 de diciembre de 1977 con el que fue arrojado al mar el "grupo de la Santa Cruz", integrado por las monjas francesas Leonie Duquet y Alice Domon, tres fundadoras de las Madres de Plaza de Mayo y otras 7 víctimas. Ese vuelo fue piloteado de noche desde el Aeroparque de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, entre las últimas horas del 14 y las primeras del 15 de diciembre de 1977.
Sobre este viaje, Arrú dijo: "el del 14 fue un vuelo normal, como ya he descripto". Y agregó: "nunca formé parte de un vuelo de la muerte, nunca tuve participación alguna en el Grupo de Tareas 3.3.2". Sobre el vuelo del 14 de diciembre, el imputado dijo que "el piloto era De Saint Georges", también imputado en la causa, cuya citación a declaración indagatoria se produjo la semana pasada. 
Memoria selectiva
El piloto comercial dado de baja de la Prefectura Naval Argentina dijo que "no recuerdo haber hecho traslado de detenidos". De este modo, no niega la acusación, sino que dice no recordar haberlo hecho. 
Sobre la logística general de los vuelos, Arrú sostuvo que "la orden de apertura de las puertas la daba el piloto al mando" y que "la apertura de puertas era hecha por el mecánico, mediante una manivela que estaba en la parte de atrás del avión". 
Sisul Hess: "iban cayendo como hormiguitas"
El imputado Emir Sisul Hess, Capitán de Corbeta retirado de la Armada, fue el tercero en declarar hoy y negó las acusaciones en su contra, por los casos de más de 50 víctimas.
En los años ´90 decidió dedicarse al turismo comercial en el sur de la Argentina. "Contaba con tono burlón cómo las personas pedían por favor y lloraban", dijo uno de los testigos en ante el Juzgado de Juan José Galeano, con respecto a los dichos de Arrú en Villa La Angostura. 
Otro testigo declaró que Hess dijo que "no sufrían, los llevaban dopados y los tiraban al río (lo dijo en tercera persona). Eran tipos muy pesados. Esos boludos no sabían a dónde iban a parar: al Tigre, al Riachuelo o al Paraná. Iban cayendo como hormiguitas". 

Verdad y justicia
"Nunca me eligieron a mí para participar en la guerra interna de los ´70, pero sí me eligieron para la Guerra de Malvinas y de Chile, porque me llevo mejor con las máquinas que con las personas", sostuvo el imputado.
Basó toda su declaración en fundamentar que él "sólo estaba habilitado para operar helicópteros" y que los mismos "no podían llegar al mar". De este modo, descartó la acusación en su contra por los casos del "grupo de la Santa Cruz". 
"Yo siento que estoy obligado a hacer esto, a contribuir con la justicia, que ha caído en eun error, involuntariamente, creo yo". Y agregó: "yo también, como toda esa gente (el público), quiero verdad y justicia". 

lunes, 18 de febrero de 2013

La estrategia del piloto de la muerte


Después de haber reconocido ante compañeros de una aerolínea que tripuló vuelos de la muerte durante la dictadura, Poch ahora desmiente esa confesión y asegura que él manejaba aviones de caza. Las pruebas en contra de su argumento que constan en el expediente.

(Fuente: Página 12)
Por Alejandra Dandan
Hoy declaran en el juicio oral por los crímenes de la Escuela de Mecánica de la Armada tres de los ocho pilotos y tripulantes acusados por los “vuelos de la muerte”. Entre ellos lo hará el piloto Julio Poch, nacionalizado holandés y extraditado por España, del que se espera una indagatoria de unas cinco horas. El primer día de juicio, Poch apareció con un cartel en castellano y holandés en el que decía que las acusaciones en su contra son mentiras, en esa lógica hoy llegará con hinchada propia. La televisión holandesa seguirá la indagatoria en un país donde el piloto viene trabajando una estrategia para ganarse a la opinión pública. En una página web desde donde publican sus “cartas”, una organización llamada “Fundación Justicia para Julio Poch” señala como objetivo “apoyar las actividades en la esfera jurídica en la necesidad de la verdad” de su caso; utilizar los “medios de comunicación” para su causa y entre los puntos principales del “plan” diseñado explican, sin problema, que lo que harán será “atraer la atención para nuestro objetivo y generar donaciones mediante la creación de una Fundación”.
También van a declarar frente a los jueces del Tribunal Oral Federal (TOF) Nº 5 Ambrosio Navarro y Mario Pablo Palet. El caso Poch es recordado porque mientras era piloto de la línea Transavia se jactó ante sus compañeros de haber piloteado “vuelos de la muerte”, en una cena en el restaurante “Gado-Gado” de Bali, después de la cual sus compañeros lo denunciaron. Interpol lo detuvo y fue extraditado por España tres años atrás. En estos años basó su estrategia de defensa en dos ejes: 1) negó haber dicho lo que denunciaron sus compañeros y dijo que lo tergiversaron; 2) intenta probar que en su vida militar se especializó en aviones de “caza y ataque”, es decir, aeronaves sin capacidad para transportar personas.
El juzgado de Sergio Torres, que tuvo la primera etapa de la investigación, desacreditó su estrategia y dijo que el “descargo aparece como un mero intento para mejorar su comprometida situación procesal”.
Uno de los puntos más fuertes de la causa es una serie de e-mails que recibieron los primeros denunciantes de parte de “amigos y compañeros” de Poch para pedirles que se retractaran. Torres cuenta en el expediente que luego de viajar al Reino de los Países Bajos para tomar las testimoniales, en 2009, un policía llamado Ariaan Cornelis Versteegt recibió en su correo electrónico “dos mensajes del testigo Reijnoudt-Brouwer a través de los que lo ponía en conocimiento que tanto él como el testigo Tim Weert habían recibido dos e-mails de Hans Dekeers, con el objeto de influir en sus testimonios brindados oportunamente”. En el primero, con fecha 19 de octubre de 2009, Hans Dekeers escribió: “Hiciste una denuncia pública contra nuestro colega Julio (...) Julio tiene una posibilidad real de ser condenado a prisión perpetua (...) creo sinceramente que tienes que considerar adaptar tu declaración. Si usaste palabras con un tenor que sugiere que Julio te ha manifestado haber estado directamente involucrado, debes considerar expresarlo en una forma diferente, con un tenor que sugiere que creías entender de la conversación que Julio tal vez tuvo personalmente un papel en los crímenes o que tal vez los defendía nada más o solamente explicaba estos crímenes en el contexto de la Junta y desde su rol como oficial dentro de las Fuerzas Armadas argentinas”. Enseguida, agregaba: “Es tu declaración, no es la mía obviamente. Cuál es la adaptación que se requiere depende de vos. Pero por la gravedad y la prolijidad necesaria considera una adaptación”, y le sugiere algunas alternativas.
Al testigo Reijnoudt Brouwer, Hans Dekeers le escribió el 27 de noviembre un correo en la misma línea. Señala que recibió una copia de su declaración, le pide diga si dijo lo que dijo, y en todo caso que evalúe cambiarlo: “Si compartís esta observación objetiva, ¿te puedo pedir entonces que, por amor a la prolijidad, redactes una corrección con respecto a tu declaración y que la presentes en la Justicia? (redacción posible: Luego de haber releído atentamente los documentos, me doy cuenta de que el informe del Dr. Torres de la declaración sugiere que el señor Poch me hubiera manifestado literalmente –en primera persona singular– que estuvo involucrado en la ESMA. La verdad me obliga a corregir esto)”.
Para Torres, estos “graves” correos muestran la “intención de parte de amigos o conocidos de Poch de influir nada más ni nada menos que en los testimonios de los testigos presenciales para que modifiquen sus declaraciones y mejorar la comprometida situación procesal”.
El otro eje del descargo de Poch es seguramente sobre el que hoy hablará más tiempo: los aviones que voló. Si bien el juzgado reconoció que Poch se habría especializado en aviones de caza, porque así surge de la cantidad de vuelos que efectuó en las aeronaves T-28, 18, A4Q Skyhawk; MC-32 Aermacchi; TA4-J, todas ellas de caza y ataque, lo cierto es que no fueron las únicas aeronaves en las que integró la tripulación en su carrera naval. Poch intervino como “copiloto” del avión C-45 (Beechcraft C-45 H), “copiloto” del B-80 (Beechcraft 65 B-80 Queen Air) y “piloto” y “copiloto” del U-16 (Grumman HU-16B “Albatros”). Además de las libretas de vuelo, un informe de la Armada del 5 noviembre de 2010 indica que prestó servicios como jefe de la División Personal de la Escuadrilla Aeronaval de Búsqueda y Rescate, en la cual había asignadas las aeronaves Grumman G-64 “Albatros”, con capacidad para transportar carga y arrojarla. En 1981, antes de entrar a Aerolíneas Argentinas, el propio Poch escribió de “puño y letra” haber sido piloto de aviones como el Fennec, el DHC-6 Twin Otter, el BE-80 Queen Air, también el Albatros, un HB-326 Aermacchi (de caza y ataque) y un A4Q Skyhawk: “Nótese que el mismo encausado reconoció haber tenido más horas de vuelo a bordo de un Albatros (395 horas) que de un Aermacchi (345)”.
Poch está patrocinado en Buenos Aires por el abogado Gerardo Ibáñez, que defiende a otros represores. Según declaró su defendido, Ibáñez puede sentirse tranquilo sobre sus honorarios: el piloto indicó que en si “resulta inocente, el Estado holandés afronta los gastos de los abogados”, que hasta 2010 sumaban 70 mil euros.

jueves, 14 de febrero de 2013

Día 18. Donda: "Ya no combatimos"


Lo dijo el imputado Adolfo Donda en su declaración indagatoria en la megacausa ESMA. Es su segundo proceso por delitos de lesa humanidad. En el anterior fue condenado a la pena de prisión perpetua, cuya condena cumple en el Penal de Marcos Paz.

(Fuente: www.espaciomemoria.ar)

El represor hermano de un desaparecido
Adolfo Donda Tigel declaró hoy en el juicio por la megacausa ESMA. El imputado es el tío biológico de Victoria Donda Pérez, nacida en la ESMA durante el cautiverio de su madre, y apropiada por Juan Antonio Azic, represor de la ESMA, también juzgado en este debate.
José María Laureano Donda, hermano de Adolfo, estuvo detenido-desaparecido en la ESMA. Es un caso emblemático, en el que un represor y parte de su familia coexistieron en un centro clandestino de detención, tortura y exterminio.
La estrategia de no saber
El imputado declaró que no sabe por qué motivos está siendo acusado y que accede a declarar para que no queden agujeros en la historia. En una apología de la Teoría de los Dos Demonios, Donda sostuvo que hasta ahora "sólo se escuchó a una parte".
En su declaración se quejó de que siempre son los mismos los imputados en el banquillo, reclamando que estén todos los responsables. Hizo referencia a una "negociación" entre las Fuerzas Armadas y el gobierno del ex Presidente de la Nación Raúl Alfonsín para determinar a quiénes juzgar. "Hubo negociaciones por las que nosotros estamos sentados acá y en primera línea". 
Donda sostuvo que las Fuerzas Armadas son una estructura piramidal y que el equilibrio depende de la base. Acusó a los altos mandos de haber actuado con "cobardía".
Citas literarias
Donda usó el libro "Leviatán" para su exposición de hoy. Sostuvo que el Estado construyó un Leviatán, con cabezas visibles para que los imputados se vean perjudicados. En la teoría de Donda, las cabezas de ese Leviatán son "una serie de funcionarios que han pertenecido a la organización terrorista Montoneros" del gobierno actual, "los organismos de derechos humanos y los testigos necesarios, que forman una especie de sociedad secreta". Sobre los testigos agregó que "fueron los enemigos de ayer y comprensiblemente son los enemigos de hoy".
"Ya no combatimos"
Donda sostuvo que su condena a prisión perpetua por delitos de lesa humanidad "es una tortura que va a durar todo lo que quede de nuestras vidas. Nos cierran las ventanas de la vida". Y agregó: "no tiene sentido resistirse, estamos en una etapa de la vida en la que ya no combatimos". 
Las fotos de la verdad
Sobre el material fotográfico sacado de la ESMA por el sobreviviente Víctor Basterra, en las que fueron retratados detenidos-desaparecidos torturados en ese centro clandestino, Donda dijo que "antes era más que ahora falsificar fotografías", poniendo en duda la realidad de sus propias víctimas. 
Sobre los hijos de los desaparecidos
"Han creado una gran diferencia: hay algunos que tienen que trabajar, mientras hay jóvenes que pueden seguir sus ambiciones políticas gracias a las indemnizaciones", en referencia a quienes cobraron las leyes reparatorias.
Pernías: "Fue una guerra institucional"
El imputado Antonio Pernías se negó a declarar y ratificó sus declaraciones anteriores, hechas en la etapa de instrucción de la causa en el año 2006."Yo podía haber participado en muchas acciones, en todas o en ninguna, era una guerra institucional". En relación a los detenidos-desaparecidos sometidos al trabajo esclavo, sostuvo que "gracias a los colaboradores la guerra contra la subversión se acortó y hubo menos bajas". 
"El destino del detenido era una decisión tomada en un nivel superior: ellos deberían responder por eso". En este sentido, el imputado que ya cuenta con una condena a prisión perpetua por delitos de lesa humanidad, se refirió a la cadena de mandos. Apeló a la decisión institucional de la Armada de involucrarse en la "guerra terrorista". "La guerra contra el terrorismo fue una decisión política e involucró a todas las instituciones", aclaró para demostrar que faltan imputados en estas causas, sobre todos sus superiores.
Los otros imputados citados hoy
Raúl González se negó a declarar. Por su parte, Raúl Enrique Scheller pidió mostrar una película porque "tengo derecho a mostrar quién es el enemigo y de decir que estábamos en una guerra". El Tribunal resolvió ver la película antes de la declaración, para definir si se incorpora o no a la causa. 
Próxima audiencia
El juicio continuará mañana desde las 10:00 horas con las declaraciones indagatorias de los imputados Alejandro Domingo D´Agostino, Rubén Ricardo Ormello, Gonzalo Dalmacio Torres de Tolosa y Enrique José De Saint Georges. Será la primera vez que declaren imputados por la causa de los vuelos de la muerte. 

jueves, 7 de febrero de 2013

DECLARO EL EX SECRETARIO DE HACIENDA DE LA DICTADURA JUAN ERNESTO ALEMANN


El funcionario que visitó la ESMA

Admitió haber estado en el centro clandestino para ver “cómo funcionaba el arma” con la que lo atacaron. Y dijo que “jamás torturaría ni mataría, soy muy cobarde”. También se realizaron las indagatorias de otros cinco acusados en el juicio.

(Fuente: Página/12)
El ex secretario de Hacienda de la dictadura Juan Ernesto Alemann admitió haber visitado la ESMA en pleno terrorismo de Estado, pero no para ver cómo se humillaba a los supuestos autores de dos atentados en su contra, como declaró el sobreviviente que lo denunció, sino para saber “cómo funcionaba el arma con la que me atacaron”. Además de Alemann, otros cinco represores desfilaron ayer ante el Tribunal Oral Federal 5 que los juzga por delitos de lesa humanidad. Hoy desde las 10 declararán Alfredo Astiz, Ricardo Miguel Cavallo y Ricardo Lynch Jones.
Alemann sufrió un atentado en 1978 y otro en 1979, que le costó la vida a su chofer. Carlos Lorkipanidse lo vio en la ESMA en 1980, durante su cautiverio. Dijo que lo vio en “La Huevera” y que le mostraron a dos cautivos encapuchados y engrillados “porque el grupo de tareas quería fanfarronear que había capturado a sus atacantes”. “A mí me dijeron que agarraron a todos estos asesinos”, había dicho Alemann en 2002. Dónde, le preguntó un periodista de la agencia DyN. “Fue privadamente... alguno, no recuerdo quién”, balbuceó mientras reinaba la impunidad.
“Se me acusa de imposición de tormentos a Orlando Ruiz”, arrancó ayer. “No lo vi, por lo tanto no lo torturé”, declaró como acusado, con derecho a mentir. “A raíz de un atentado, me invitaron a la ESMA para conocer las armas. Ahí conocí cómo funcionaba el arma con la que me atacaron”, dijo, y aseguró no haber formulado denuncia tras los atentados. “Jamás torturaría ni mataría, soy muy cobarde”, agregó, sin ocultar su particular concepto de la valentía. “Fui secretario de Hacienda durante cinco años y salí más pobre de lo que entré. Que me acusen por delitos de lesa humanidad hiere lo más profundo de mi ser”, se victimizó. Cuando uno de los jueces le preguntó quién lo invitó a la ESMA, dijo no recordarlo. Admitió su relación con Massera, aunque tomó distancia. “Tenía un conflicto porque había criticado los gastos excesivos realizados para el Mundial de Fútbol”, dijo.
“Se me acusa de crímenes que no cometí”, declaró el capitán Eugenio Vilardo, ex subdirector de la oficina de prensa de Cancillería, donde eran obligados a trabajar algunos secuestrados. “Se han violado los principios básicos del derecho”, afirmó, y en varios pasajes de su declaración no ocultó su orgullo de haber estado en la Armada. “Eran tiempos de plomo, donde teníamos que estar armados para combatir la guerrilla hasta con dos granadas en mano”, dijo. “La vida militar implica disciplina y entrega. Las órdenes no son motivo de discusiones, se acatan. Ese es el principio de la vida militar en todo el mundo”, invocó la obediencia debida. “Desconozco la competencia de este tribunal para juzgarme”, concluyó.
El contraalmirante Edgardo Otero negó haber dirigido la ESMA en 1980 y trató de demostrar que entonces ocupaba funciones en YPF. Remarcó que no participó de la “guerra civil o la lucha contra el terrorismo subversivo”. Agregó que “los jueces que me están juzgando cometen un error garrafal, porque desconocen lo que sucedió en esa época y también el funcionamiento de los escalafones militares. Trabajé en la parte logística, no en la parte operativa”. “El objetivo final del terrorismo subversivo era la toma de poder. Su proliferación en todo el país ponía en peligro a la Nación. No admito que el fiscal sostenga que son perseguidos políticos, eran militantes terroristas y subversivos”, afirmó.
Manuel García Tallada, condenado en el primer juicio, se negó a declarar, igual que el suboficial Paulino Oscar Altamira, ex guardia y miembro del GT 3.3. El teniente Jorge Radice, también condenado, dijo que formó parte del área de logística, pero “no participé de la entrega de ningún bebé ni en interrogatorios”. “No cometí ningún tipo de homicidio”, afirmó, y concluyó con un involuntario elogio al Estado: “El Estado argentino es responsable por todo lo que me aconteció y me acontece”.

Se reanudó el juicio por los delitos cometidos en la ESMA


(Fuente: http://www.espaciomemoria.ar)
El Tribunal Oral en lo Criminal Federal Nº 5 de la Ciudad de Buenos Aires retomó las audiencias en la megacausa ESMA. El juicio se reinició con las declaraciones indagatorias de los imputados Jorge Luis Magnacco, Carlos Orlando Generoso, Jorge "El Tigre" Acosta, Miguel Clements, Francisco Lucio Rioja, Rubén Franco y Alberto González.
04/02/13

El primero en sentarse en el banquillo de los acusados fue Rubén Oscar Franco quien manifestó que no iba a declarar y que no contestaría preguntas. Sólo expresó unas palabras en las cuales rechazó cada uno de los casos por los que está imputado y agregó que sus abogados presentarán las pruebas necesarias para comprobar que no es culpable. Además, calificó de “pobres y dudosos” a los testimonios que llevaron a su acusación.
El Capitán de Navío Médico retirado de la Armada Argentina Jorge Luis Magnacco dijo: "jamás supe que existió una unidad de tareas, no estuve destinado en la ESMA, asistí dos partos", en referencia a los casos de Silvia Labayrú y Cecilia Viñas de Penino. 
Una vez finalizada su declaración, Magnacco fue filmado mientras caminaba por Barrio Norte, visitaba un shopping y hacía compras, violando su prisión domiciliaria. Tras una denuncia de la agrupación H.I.J.O.S., el Tribunal Oral en lo Criminal Federal N° 5 de la ciudad de Buenos Aires decidió suspender el beneficio de prisión domiciliaria que se le había otorgado y ordenó su detención.
El imputado ya cuenta con tres condenas por delitos de lesa humanidad vinculados a la sustracción, retención y ocultamiento de menores de 10 años de edad. Éste es el cuarto juicio que afronta, el primero por la ESMA. Además, está siendo juzgado en un juicio por la apropiación de un menor de 10 años de edad, que se desarrolla por escrito.
"En la ESMA no se le quitó la vida a nadie"
Jorge Eduardo Acosta, alias “El Tigre”, quien ya tiene dos condenas por delitos de lesa humanidad, dijo: "Los testigos tienen hasta una escuela para formarse en los testimonios". En su declaración también manifestó que el "gobierno está siendo motorizado por terroristas de los ´70".
Acosta repitió lo que fueron sus últimas palabras en el juicio en el que fue condenado por el plan sistemático de robo de bebés: “En la Argentina hubo una guerra civil revolucionaria terrorista-trotskista”.
El ex capitán de la Armada manifestó que existió una guerra civil: “Nosotros combatíamos contra ellos, los terroristas, pero siempre privilegiamos la vida. En la ESMA no se le quitó la vida a nadie. Cuando se hacían los traslados era sólo para cambiarlos de destino, no para quitarles la vida”, declaró, y agregó que “los terroristas sembraron la muerte en la Argentina”. 
Además, expresó que “la guerras revolucionarias tienen sus tácticas y técnicas y a partir de esto se combatió”, y reconoció que hubo daños injustos, “pero no había otra alternativa, ya que el país se encontraba en un enfrentamiento armado”. Acosta también manifestó: "quiero rendir homenaje a todas las víctimas fatales que se produjeron en nuestro país" durante lo que llamó "una guerra civil" y declaró que está enterado del fallecimiento de algunas madres de Plaza de Mayo y dijo lamentarse por aquellas madres que no pudieron tener una respuesta sobre lo sucedido con sus hijos.
Asimismo, admitió: "Soy absolutamente responsable de todas las órdenes militares que he impartido a los suboficiales y a los subalternos”.
En octubre de 2011, Acosta fue condenado a la pena de prisión perpetua por delitos de lesa humanidad cometidos en la ESMA. Asimismo, en julio del 2012 recibió la pena de 30 años de prisión en el juicio por el plan sistemático de robo de bebés, hijos de desaparecidos nacidos en cautiverio o secuestrados junto a sus padres. Ninguno de los dos fallos está firme. Actualmente, Acosta cumple sus condenas en el Penal de Marcos Paz.
Los otros imputados
Francisco Lucio Rioja afirmó que el Tribunal no es constitucional y que no corresponde que lo juzgue. Además, aclaró que los delitos ya están prescriptos. Se negó a contestar preguntas. El Tribunal leyó tres declaraciones indagatorias anteriores, en las que Rioja declaró que nunca estuvo destinado en la ESMA y que no participó del Grupo de Tareas 3.3.2.
Por su parte, el imputado Miguel Clements desmintió haber estado en la ESMA durante el período en el que se lo acusa y dedicó su declaración a intentar probarlo, para lo que presentó un detalle de su legajo y varios documentos de la Armada, como planillas de navegación y el libro de historial del buque al que estuvo designado. "El fiscal ha sido mal informado sobre mis períodos de navegación. ¿Producto de una omisión voluntaria o involuntaria?, eso es lo que me pregunto yo".
El megajuicio
En este nuevo tramo de la megacausa ESMA, empezaron a ser juzgados 68 imputados (de los cuales, el capitán de navío (RE) Roberto Pérez Froio murió en enero pasado sin condena) por los casos de 789 víctimas. Entre los acusados están quienes formaban parte de la línea de mando de la ESMA, los represores más simbólicos y otros nuevos acusados.
Se trata del proceso oral más grande de la historia judicial argentina, en el que llegan a juicio por primera vez ocho aviadores navales y de la Prefectura acusados por los "vuelos de la muerte" en los que se arrojaba prisioneros vivos al mar o al Río de la Plata para convertirlos en desaparecidos. 
También son juzgados dos civiles, el abogado Gonzalo Torres de Tolosa, alias Teniente Vaca, acusado como participante de los vuelos, y Juan Ernesto Alemann, ex secretario de Hacienda de la dictadura, acusado de haber presenciado el interrogatorio bajo torturas a Orlando Ruiz, quien se encontraba secuestrado y permanece desaparecido. 

martes, 5 de febrero de 2013

El sarcasmo de Acosta


(Fuente: Página /12)
El represor Jorge “El Tigre” Acosta logró sorprender a querellas y testigos de la audiencia que tuvo lugar ayer en el marco del juicio oral conocido como ESMA III, en el que es uno de los imputados. “En la ESMA –aseguró, según relataron participantes en la audiencia– se privilegió la vida, aun yendo en contra de los procedimientos.” Además, claro, negó los cargos en su contra. También se consideró inocente el último jefe naval de la dictadura cívico-militar, Rubén Franco, quien no obstante se negó a ser indagado. Según su criterio, la acusación en su contra se basa en “pruebas testimoniales pobres y dudosas”. También decidió remitirse a silencio el obstetra de la Marina Jorge Magnacco, quien asistió a partos clandestinos en la ESMA, el mismo represor que ayer fue denunciado por Hijos por violar su detención domiciliaria (ver aparte).
Acosta rechazó las acusaciones en su contra y se consideró víctima de una “persecución político-jurídico-mediática” durante su declaración en el marco del juicio oral en el que se lo imputa junto a medio centenar de acusados. Para ilustrar su argumento, el marino puso como ejemplo una foto famosa en donde se lo veía con las vedettes Noemí Alan y Adriana Brodsky, en plena dictadura, y aseguró que se trató de “un encuentro protocolar”. Luego de extenderse sobre sus condiciones de detención, y de que el tribunal lo conminara a responder sobre los hechos por los que está siendo juzgado, se dedicó a ir caso por caso y nombre por nombre de los hechos que se le adjudican, limitándose a señalar cuáles conocía, pero sin aportar ningún elemento de relevancia.
Franco, por su parte, se sentó en el banquillo de los acusados para afirmar que la acusación se construyó sobre “pruebas testimoniales pobres y dudosas”, pero se negó a prestar declaración indagatoria ante el Tribunal Oral en lo Federal 5 que ayer retomó las audiencias tras la feria judicial de enero. Cabe recordar que Franco fue absuelto en el juicio oral por el plan sistemático de sustracción de bebés nacidos en cautiverio durante la dictadura.